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domingo, 26 de febrero de 2012

Tiempos de cambio

Según personas próximas a la sensibilidad política Más Izquierda Madrid en Alcalá de Henares, ésta no ha querido formar parte de la candidatura llamada “unitaria” de la agrupación socialista al próximo Congreso Regional del PSM. En este caso, han confluido los intereses de Eusebio González y María Aranguren para apartar a Mas Izquierda, y los de ésta sensibilidad, de no querer formar parte de esa candidatura, a pesar de los ofrecimientos de última hora. Por motivos distintos, a nuestro juicio.

El primero, porque el secretario general sabe que, cada día más, la oposición local y regional se articula a través de Más Izquierda Madrid. Y pretende pararla en Alcalá de Henares.

El segundo, porque la exconcejala socialista María Aranguren, quiere ser secretaria general de la agrupación. Para ello, no ha dudado en pactar con Eusebio González los votos de Más Izquierda en beneficio propio, traicionando los acuerdos alcanzados. Esa acción, innecesaria, la ha convertido para una parte importante de la agrupación en una persona poco fiable desde el punto de vista moral y político.  

El tercero, porque para Más Izquierda Madrid no todo vale. Se pueden tener posiciones encontradas, debatir, discutir, poner más o menos pasión en lo que se dice, llegar a acuerdos o no llegar a ninguno. Pero si se llega a un acuerdo, el socialista honrado lo cumple. Solo el que está en política por su propio interés incumple estas reglas de partido.

Dicho lo anterior, conviene una reflexión sobre la agrupación socialista, la cual da para mucho, al ofrecer un mapa de intereses variados, sin que en esa argamasa se observe la presencia de valores que hagan entendibles los acuerdos. Porque eso de yo te doy, tú me das, el bien pagao, la bien pagá…, es una caricatura de lo que hay que desterrar. La pregunta no es ¿qué me das?, sino ¿qué podemos hacer juntos?

Permitan los lectores un análisis de la candidatura “unitaria” en la que confluyen por diferentes motivos los intereses del diputado regional y secretario general de la agrupación socialista, Eusebio González; del concejal portavoz municipal del grupo socialista en el Ayuntamiento y presidente de la agrupación, Javier Rodríguez; del concejal y miembro de la ejecutiva local, Fernando Fernández; de Izquierda Socialista, con una persona en la ejecutiva y otra concejala en el Ayuntamiento de Alcalá; y del grupo formado por antiguos guerristas y escindidos de otros grupos con la ex concejala Maria Aranguren, al parecer, al frente. 

Para la próxima cita, al secretario general lo están abandonando unos y otros. De plaza fuerte “tomasista”, a llevar doce delegados, de los cuales, al menos tres, podrían cambiar el sentido de su voto. Dos de Izquierda socialista que harán lo que les diga su corriente en Madrid, y los demás votarán cambio. Más votos en contra de Tomás que a favor.

Son muchas las posibilidades de que Tomas Gómez pierda este Congreso. Cada día se suman al proyecto de Pilar Sánchez Acera más militantes socialistas. Tomás Gómez representa la bronca interna, el conmigo o contra mí y las derrotas continuadas en las urnas madrileñas. No puede ofrecer nada nuevo a nadie. Sin embargo, Pilar representa la frescura del socialismo que no se deja derrotar, la capacidad de consenso y la esperanza de que es posible remontar esta situación adversa.

Como en toda elección, siempre se tiene la posibilidad de ganar. Pero sería pan para hoy y hambre para mañana. Porque la diferencia, de ganar, sería pequeña, y se encontraría con una oposición articulada en el territorio y con amplia presencia en los órganos nacionales de decisión, mientras él sólo tendría en ese órgano a una vocal sin competencias ejecutivas.

Después de este Congreso la cita es con los militantes socialistas de Alcalá, los cuales habrán de elegir una nueva dirección de la agrupación. En ella, Eusebio González tiene muchas posibilidades de dejar la secretaría general a la vista de los abandonos actuales, tanto si gana Tomás como si no.  Su única opción, después de echar las cuentas, es generar, si le es posible, los acuerdos necesarios. Aunque, quizás, se esté haciendo demasiando tarde.

Dice un amigo de Compromiso Socialista, que cuando se sube la escalera del éxito hay que tener mucho cuidado con no pisar los dedos de los que están en ella, porque antes o después hay que bajar, y ahí te estarán esperando.

Quizás el secretario general de la agrupación y algunos de sus colaboradores más próximos hayan pisado muchos nudillos.


¡Salud!

miércoles, 1 de febrero de 2012

Tantos por ciento

Analizando los movimientos previos al congresillo de Madrid, los habidos en el mismo y los resultados obtenidos, se observan dos elementos de reflexión; uno, las actitudes internas, que siguen igual o peor que siempre; dos, la grieta del PSM es cada vez mayor.  

Han aparecido otra vez las criticadas mesas camillas, las decisiones acordadas mientras se toma una copa, las viejas actitudes de viejos partidos encerrados en sí mismos, el paripé y el menudeo político. 

Sorprende en un partido que se dice de izquierdas, el alejamiento de las mujeres de puestos de representación, rompiendo los valores de igualdad por los que tanto ha luchado y lucha esa organización. Trece mujeres y treinta y un hombres no casa ni con las normas estatutarias ni con los más elementales principios de igualdad que se dicen proteger. Y sorprende mucho mas que una de las trece elegidas sea la Presidenta de Mujeres Progresistas de España y no haya dicho ni una palabra en defensa de la representación de la mujer. Malos tiempos cuando lo que se hace y lo que se dice son cosas distintas.

Por otra parte, el espectáculo de Madrid y de otros lugares de España donde los militantes socialistas hacen decaer su derecho de tomar posición sobre los candidatos a la Secretaría General del PSOE, es desolador y desalentador. Observar cómo personas con capacidades suficientes, ceden su derecho de elección de candidatos a otras personas para que estas hagan lo que quieran con el mismo, nos retrotrae a los tiempos en que el poder se daba a los caudillos para que estos hicieran lo que mas les conviniera. Y así, en el caso de Madrid, Tomás Gómez puede direccionar el voto para la catalana Carme Chacón, para el cantabro residente en Madrid Alfredo Pérez Rubalcaba o llevar el voto a la abstención o al voto en blanco, previa negociación con los intereses en juego.

Al final, si le dejan alguna puerta abierta, acabará votando a favor de Pérez Rubalcaba mientras lanza un mensaje a los que le han dado el cheque en blanco de “siempre pondré los intereses del partido por encima de los míos”, u otros semejantes. Esta película ya la han puesto y el personal está avisado. No seria de extrañar que varios de los de la lista de Gómez se alejaran antes del Congreso de su posición y manifestarán su apoyo público a Rubalcaba. El tiempo corre que vuela. Y el futuro siempre está a la vuelta de la esquina.

Las diferencias en el PSM son cada vez mas profundas, cada nueva elección es motivo de duros enfrentamientos y lo que era una vaga oposición, más intelectual que material, se va organizando como un reguero de pólvora. Los socialistas de Madrid quieren solvencia, competencia y transparencia en sus líderes. Quieren avances y no retrocesos, quieren debate de ideas, de apoyar a  los mejores, de estar con los ciudadanos. Los socialistas de Madrid están cansados de banderías interesadas, del o estas conmigo o contra mí, de la expulsión de los más críticos, del chalaneo, mientras el PP de Esperanza Aguirre hace lo que quiere con los intereses de los trabajadores, sin que se observen posturas al menos tan agresivas como las suyas, pero en contrario, por parte del PSM.

Lo que no quieren los socialistas madrileños son las naderías, entre otras,  las de ese diputado socialista regional que después del congresillo sale ufano a los medios de comunicación para decir que la cosa va muy bien. Que en las primarias los porcentajes fueron del 52% frente al 48% y ahora son del 55% por el 45% a favor de Tomas Gómez. Se trata de una comunicación a los madrileños falsa porque son procedimientos distintos. Mientras en las primarias todos los votos sumaban, en la elección de delegados no suman los de candidaturas que no superen el 20%. A titulo de ejemplo, en la ciudad de Parla, una lista opositora a la de Tomás consiguió algo mas del 18%, al no llegar al 20% no consiguió representación y sus votos no se contabilizaron. Ahí está la mentira a los ciudadanos. Y la nadería. Porque después de un congreso regional, todo lo que se le ocurre a ese diputado es hablar a los medios de comunicación de tantos por ciento en lugar de hablar de política, de propuestas para mejorar la vida de los madrileños. Que vamos ganando viene a decir. Se cuenta que Esperanza Aguirre todavía se está riendo. Si  algún dios existe que venga y le ayude. O no.

La imagen que transmite el PSM a los ciudadanos de Madrid no es compacta, ni intelectualmente sólida, sino dispersa, rota, dividida y ambigua. Mucho trabajo queda para que los ciudadanos madrileños vean en el PSM la solvencia necesaria, el rigor en las propuestas, la determinación para llevarlas a cabo, los valores y el esfuerzo incansable con el que conquistaron desde el tajo la más alta magistratura del Estado.

Se puede hacer, va a costar mucho esfuerzo, pero se puede hacer.

¡Salud!